Cuando una persona presenta un déficit funcional que condiciona la dependencia en una o varias actividades de la vida diaria es necesaria la figura de un cuidador que pueda suplir o aportar ayuda en esa actividad. Este cuidador puede ser profesional o, en la mayoría de los casos, un familiar. Cuando la carga de cuidados es muy alta o sobrepasa la capacidad del cuidador pueden aparecer una serie de síntomas en este último que van a desembocar en lo que se conoce como “sobrecarga del cuidador”
En esta mesa se podrían tratar tres aspectos: 1- síntomas y signos de alerta en el cuidador. 2- Herramientas para detectar sobrecarga en el cuidador. 3. Como prevenir y evitar la sobrecarga del cuidador.